Geralt de Rivia, el famoso brujo norteño, conocido como el Lobo Blanco, acude a la ciudad de Kerack tras terminar un encargo en los alrededores a descansar como merecidamente pueda. Sin embargo, lo que parecía que iba a convertirse en una relajada estancia pronto da con los huesos del pobre Geralt en la cárcel acusado de un delito que no ha cometido, así como objeto de interés de la hechicera Lytta Neyd, llamada Coral, que tiene planes
Por si esto no fuera suficiente, alguien le roba las espadas, herramienta indispensable de su trabajo y necesarias para vivir, creándole un problema más al que enfrentarse en esta situación. Pero, por suerte o por desgracia para él, no lo hará solo puesto que el bardo Jaskier se encuentra en esos momentos visitando a un pariente en Kerack e intentará ayudar, dentro de sus posibilidades, a su amigo Geralt.
Tras más de quince años desde que Sapkowski diera por finalizada la saga del brujo, el regreso al oscuro mundo fantástico se produce con una novela precuela a todas las historias recopiladas del cazador de monstruos albino, aprovechando el momento cumbre de popularidad que Geralt vive gracias a la industria de los videojuegos y al excelente trabajo realizado para la tercera parte de la saga 'The Witcher Wild Hunt' llevado a cabo por la polaca CDPROJEKTRED.
Así pues, Geralt de Rivia, el Lobo Blanco, brujo que se ha ganado durante años su fama de eficaz cazador de monstruos y juguete roto de Yennefer, se encuentra implicado en varias tramas que pretenden utilizarle, ya sea como chivo expiatorio, ya valerse de sus habilidades.
Sin espadas y bajo fianza por un delito que no ha cometido, todo ello orquestado por la hermosa hechicera Coral, Geralt se deja involucrar en los problemas que el Gremio de Hechiceros tiene en el Castillo de Rissberg, un lugar de estudio dirigido por Hortulano, uno de los más ancianos practicantes de la magia, cuyos alrededores se han visto atacados en los últimos tiempos por algo desconocido. Todo ello mientras sigue la pista de sus espadas de brujo robadas y tiene que lidiar con la familia real de Kerack y los entresijos sucesorios que, si no se anda con ojo, serán otro quebradero de cabeza más para él.
Esta novela de Geralt, que supuso toda una sorpresa cuando se anunció, parece querer retomar el espíritu de los dos primeros libros de relatos cortos y hacer una concatenación de aventuras una tras otra, que bien podrían recordar a lo que los jugadores del videojuego se encuentran. Además, Sapkowski aprovecha para sacarse un par de datos de la manga para contradecir o fijar como canónico por su parte, algunos detalles que CDProjektRed añadía a las historias que ha contado del brujo en los juegos que ha creado o para contradecir, como si tuviese que afianzar su autoría del personaje por encima de la fama que ha ganado por la saga de videojuegos (y aquí hago referencia a la existencia de una sexta señal que nunca se había mencionado o a la aparición de un brujo de otra escuela que no es la del lobo por primera vez en toda la saga).
Además y para rizar el rizo, la novela termina con Nimue (la Dama del Lago), de camino por un bosque antes de convertirse en la hechicera que nos presentan en el libro 7, quien al ser atacada por un monstruo, la salva un brujo de cabellos blancos que, conforme aparece desaparece, dejándonos a los lectores más patidifusos aún ante dicha aparición, teniendo en cuenta el final de la saga original, pero siempre bajo la ambigüedad que caracteriza a Sapkowski, sin saber si es real o solo un sueño.
En conclusión, un placer volver a los mundos del brujo rivio en este relato precuela que se englobaría entre "El último deseo" y "La espada del destino", donde tendremos una aventura sin pausa rememorando las dos primeras novelas de relatos cortos, en un libro muy disfrutable.
Le doy un 7'8/10. Leer más...
